Después de una noche gélida (como siempre las botellas amanecieron congeladas al interior de la carpa...) amanece increíble. a las 3.45 el Plomo está despejado, el cielo estrellado y con luna. No puede estar mejor para subir. Mientras me preparo pasan algunos montañistas que vienen de federación. Parto a las 4:30am planeando unirme a alguno de estos grupos para no subir solo. |